Los días 16 y 17 de noviembre, nuestras compañeras futbolistas de primera división han convocado una huelga. Están hartas de verse ninguneadas y de que las tomen el pelo. Hasta 18 reuniones han celebrado, y el pasado martes, 5 de noviembre, celebraron la reunión número 19, sin conseguir lo que piden. ¿Y qué quieren? Sus reivindicaciones son tan elementales que deberían sonrojar a gobierno, federación y clubes. Quieren un convenio colectivo de mínimos, cosas tan básicas como un salario mínimo, cotizar a la Seguridad Social, acceso a las prestaciones de maternidad, una cobertura adecuada en caso de lesión…
Nuestras compañeras han recibido muy buenas palabras y palmaditas en la espalda. Pero han pasado muchos meses desde el primer encuentro para negociar el convenio, y la cosa no avanza. Parece que finalmente el bloqueo verá la luz al final del túnel, y las futbolistas conseguirán acceder a esos derechos tan elementales que amparan a cualquier trabajador de nuestro entorno, menos a ellas.
Desde Aspasia mostramos una vez más nuestro apoyo y solidaridad a nuestras compañeras futbolistas, así como a todas las deportistas que reclaman algo tan necesario como un mínimo reconocimiento de derechos en el ámbito del deporte femenino, con el fin de ir acercándonos paulatinamente a ese objetivo aún tan lejado de la Igualdad efectiva y real entre nosotras y nuestros compañeros en todos los ámbitos de la vida. También, por supuesto, en el deporte.
He aquí la noticia publicada por el diario DEIA este pasado miércoles, 6 de noviembre: